El sector de las actividades aéreas en Venezuela ha experimentado un notable impulso en 2023 con la incorporación de más aerolíneas, rutas y frecuencias. Este crecimiento ha sido fundamental para la recuperación del sector, y se prevé que en 2024 se observe un desarrollo aún mayor, especialmente en las operaciones internacionales desde aeropuertos alternos al principal terminal, el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía.
La mayor conectividad aérea no solo es vital para el sector aeronáutico sino que también tiene un impacto positivo en otras áreas como el turismo y el comercio. Según cifras de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), hasta mayo de 2024 un total de 43 vuelos internacionales se operan regularmente a seis aeropuertos en ciudades del interior del país, tales como Valencia, Maracaibo, Barcelona, Barquisimeto, Maturín y Puerto Ordaz.
Las estadísticas de ALAV resaltan que de 176 operaciones aéreas internacionales que ocurren semanalmente, 43 vuelos operan desde ciudades del interior de Venezuela. Esto indica un incremento significativo de 67,6% en las operaciones semanales al exterior desde los seis terminales nacionales, comparando los datos de 2021 (105 operaciones) y mayo de 2024 (147 operaciones).
A pesar de los avances, aún existen aeropuertos como el de San Antonio del Táchira, Santo Domingo en Táchira, y Punto Fijo en Falcón, que no tienen actividad de vuelos internacionales. Por otro lado, el Aeropuerto Internacional Santiago Mariño en la Isla de Margarita recibe solo vuelos chárters desde países como Rusia y Turquía, sin operaciones regulares.
Vicky de Díaz, presidenta de la Asociación Venezolana de Agencias de Viaje (AVAVIT), destacó que el aumento de la conectividad aérea permite una mayor oferta de vuelos y la oportunidad de promover más destinos a los clientes, lo que se traduce en un margen mayor de comercialización para el sector.
El 2024 se perfila como un año prometedor para las actividades aéreas en Venezuela, con un aumento en la conectividad y una recuperación significativa del sector, especialmente desde el último semestre de 2024. Este crecimiento no solo beneficia a la industria aérea, sino también al turismo y al comercio, marcando un nuevo capítulo en el desarrollo económico del país.